MAQUINA TRAGA GOLES

Oliver Baumann, arquero y capitán del Friburgo, tuvo una noche para el olvido. Fue el protagonista en la derrota de su equipo con tres errores gravísimos que fueron aprovechados por los jugadores del Hamburgo, que ganó 3-0.

Todos tienen un día negro. Uno en el que nada sale bien, que si hay tiros... salen por la culata. Precisamente, el domingo le tocó sufrir a Oliver Baumann, arquero y capitán del Friburgo. Recibían al Hamburgo por la Bundesliga y hasta el minuto 37 del primer tiempo, el uno la venía rompiendo. Tapó varios mano a mano y defendía el cero de su arco. Sin embargo, tras un pase largo de los visitantes, Baumann salió apresuradamente y la pelota lo superó por mucho. Beister, delantero del Hamburgo, definió tranquilo con el arco vacío. Error garrafal del capitán y patada al palo de impotencia.

Vestido completamente de amarillo, el guardameta invocó a la mala suerte a que haga mella en sus actos. En el segundo tiempo, otra pésima salida que no tuvo redención. La pelota hizo malabares en sus manos y torpemente se le escurrió. Lasogga, nuevamente sin impedimentos, se anotó en el marcador. Por si fuera poco y para convertir un hat-trick de errores, sobre el final del match, Beister remató de afuera del área y el portero dejó un rebote corto para que Van der Vaart pusiera el tercero.

Tras su desastrosa labor, el arquero salió a pedir disculpas por su rendimiento y aclaró: "Prefiero que hayan sido tres errores juntos que uno en cada partido". Con su contrato recientemente renovado y con un futuro prometedor, desde el club salieron a bancarlo. "Nos salvó muchos puntos. No podemos criticarlo por un partido", manifestó Fritz Keller, presidente del club.

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