LOS DETALLES DESCONOCIDOS DE MARCELO BIELSA EN EL INTERIOR DE CÓRDOBA: SU SIMPATÍA POR TIRO FEDERAL, LAS SIESTAS DE VERANO Y LAS ESCAPADAS PARA JUGAR AL FÚTBOL

Su hermano Rafael, reveló algunos detalles desconocidos de la infancia de Marcelo Bielsa en Morteros, Provincia de Córdoba. Todos los detalles de la charla que mantuvo con "Mucho Mas que Dos" por AM 1530. Su simpatía por Tiro Federal de Morteros, las siestas de verano y las escapadas para jugar al fútbol y la importancia de la ciudad cordobesa para su formación.

Todos sabemos la manera en que vive Marcelo Bielsa y su personalidad tan inédita. También conocemos sus logros, su manera de pensar y sus detalles como entrenador de fútbol, pero poco conocemos sobre su infancia. Justamente, su hermano, Rafael Bielsa, actual embajador argentino en Chile contó detalles de la infancia de su hermano. La infancia de los Bielsa fue en Morteros, Provincia de Córdoba. "Mi madre era de Morteros y la familia de mi madre (Caldera de apellido) aún siguen viviendo en Morteros. De modo tal, que esa ciudad Morteros, fue muy importante en la educación de Marcelo y de nosotros, porque hasta los 15- 16 todas las vacaciones de verano e invierno las pasábamos en Morteros. Nosotros elegimos el Tiro Federal, éramos de Tiro Federal, además dos de nuestros tíos fueron presidentes del Club. Nosotros con Marcelo pasábamos muchísimo tiempo en el Tiro", recordó en "Mucho Mas que Dos" programa que se emite todos los sábados de 8 a 12 por AM 1530, en Morteros.

Continuando con estos datos inéditos de Bielsa en Morteros, Rafael recordó. "Nosotros cuando ibamos a Morteros, el momento delicioso del día era cuando nos mandaban a dormir la siesta que era obligatoria, mi abuela (la mamá de mi mamá) nos escondían las zapatillas, porque la vereda estaba muy caliente (era verano) y nosotros salíamos igual, nos escapábamos e ibamos a jugar al fútbol a media cuadra a un acopiador de Vinos, que tenía un terreno de tierra con arena. Jugábamos sin hacer mucho ruido para que nadie se despertará de la siesta. Esa era nuestra diversión. La diferencia que teníamos con Marcelo es que nosotros jugábamos un rato, un par de partidos y el jugaba 8 horas. Todos los turnos: Vermú, noche, matiné. Siempre fue sumamente intenso, pero con el fútbol. El siempre dice que no era un buen jugador, pero para mí fue un jugadorazo. Le encantaba jugar, yo no recuerdo que de chico se dedicaba a analizar el fútbol. Se dedicaba a jugarlo, a disfrutarlo...", explicó.

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