JUANFER QUINTERO Y LAS CHANCES DE VOLVER A RIVER, EL ELOGIO A RIQUELME, Y EL RECUERDO DEL GOL A BOCA EN MADRID


"Juanfer" dejó en claro las ganas que tiene de regresar a River en una charla profunda con Super Deportivo Radio por Radio Villa Trinidad. Recordó su primera charla con Gallardo y una contundente definición sobre lo ocurrido en Madrid. "De campeonatos, de títulos, creo que no hay nada más que eso", tiró. También, dejó una definición top sobre Riquelme. "Quiero agradecerle todo lo que hizo, sin darse cuenta, para mí carrera y la de muchas personas. De Román me gustaba cuando la pisaba, cuando colocaba una pelota de gol o sus tiros libres. Fue esa persona que a uno lo inspiró a tener esa pasión por el fútbol". Por último, dejó conceptos sobre Julián Álvarez y contó que es lo que más extraña del mundo river.

Juan Fernando Quintero revolucionó el mundo River en las últimas horas y no es para menos. El autor de uno de los goles más importantes de la historia Millonaria dio indicios mediante sus redes sociales que quiere pegar la vuelta y vestir nuevamente la casaca del "Millonario". El hombre recordado por el histórico gol en Madrid ante Boca que valió una Copa Libertadores histórica se encuentra desde el 2020, en el Shenzhen FC, que compró el  90% de la ficha de Quintero en casi seis millones de euros brutos (5.947.500 euros para ser específicos). El futbolista de 28 años firmó un contrato por tres años. Es decir, tiene vínculo vigente, y para volver, el Millonario deberá negociar con los chinos. Sobre este tema y otros temas vinculados al mundo River, "Juanfer" accedió a una charla fantástica en Super Deportivo Radio por Radio Villa Trinidad con Emiliano Nunia y Santiago Sotto.

Si te nombran “River”, ¿Qué es lo primero que se te viene a la cabeza?

-Mucho. A raíz de que futbolísticamente me fue muy bien, en lo personal encontré un país increíble, personas demasiado importantes en lo que es hoy en día mi vida y se quedaron como mi familia, es todo lo que se me viene a la cabeza, es la historia que viví dos años y medio.

¿Qué aprendiste en el “Mundo River”? ¿Qué te enseñó? 

-Desde que uno llega a River lo van canalizando a lo que significa estar ahí. El respeto, el jugar bien al fútbol, el tener una identidad fuera del campo también como persona, los valores, y todo eso, desde el día en que llegas te lo marcan, y sobre todo que puedes dar mucho en lo futbolístico, pero aparte de eso se enfocan en como representar bien al club, al escudo, y a cómo se comporta uno cuando sale del campo.

¿Qué recordás de aquel pibito que empezaba a jugar a la pelota en el barrio?

-Yo creo que el entrenar en el barrio, en la cancha, el patear hasta las 3 o 4 de la mañana en el barrio con mis primos, con mi familia, creo que de esos momentos, después a uno la vida se le va presentando de manera diferente y sobre todo las experiencias del fútbol siga viviendo cosas bonitas y que uno no deje a ese niño a un lado, sino que en todo momento disfrutar de las situaciones que te da el fútbol. Siempre lo recuerdo, hoy es un día es una responsabilidad pero nunca dejará de ser una pasión el fútbol, uno siempre lo ha llevado en la sangre desde muy niño, mi familia me ayudó mucho, sobre todo un tío que tenía una escuela de fútbol y a los 6 años yo entré y me inculcó el fútbol hasta por los ojos, por todo el cuerpo, y uno se forma a raíz de eso. La pasión nunca se puede terminar, el día que se acabe la pasión ahí es donde uno va a hacer un paso al costado.

¿El fútbol argentino te hizo incrementar esa pasión por el fútbol?

-No es que se agrando, pero sí creo que genera una responsabilidad. Creo que el día a día de River genera eso, hasta que en un momento te satura. Pero uno desde que llega a River hasta que se va nunca va a olvidar esos momentos tan bonitos que vivió, y creo que más que agrandar la pasión es la responsabilidad de llevar un escudo, una camiseta que es importante, que representa mucha historia y tienes que estar a la altura de ella. 


¿Te acordás de la primera charla con Gallardo cuando llegaste a River?

-Fue sobre los valores más como persona, el énfasis fue en eso, que tenía que saber que tenía que ganarme las cosas en el campo y por fuera hacer las cosas bien. Esos son los valores que inculca Gallardo, y que hace que se marque la diferencia con los jugadores.

-¿A quién mirabas cuando eras niño, a quien querías imitar futbolísticamente?

-Siempre mire todos los volantes 10, siempre admiré mucho a Rivaldo, fue el jugador que más representaba lo que yo quería ver, era mi molde a seguir. Después tuve muchos jugadores de experiencia que me enseñaron a crecer, sobre todo en el Envigado FC. Hasta el día de hoy vengo de aprender de jugadores de experiencias e importantes, y creo que al final esas son las personas que le marcan a uno lo que va a ser su carrera.

Argentinos, ¿a quién admirabas? 

-Cuando crecí, en mi posición admiraba mucho a Pablo Aimar, Riquelme, Gallardo. Me tocaron jugadores que marcaron mi vida. En el caso mío llegué a Argentina y tuve a Marcelo como entrenador, después escuchar a Riquelme que te elogia, respeta y valora tu trabajo para uno es satisfactorio. Son jugadores que uno crece viéndolos, se asemeja y quiere hacer cosas importantes como lo hicieron en ese momento porque al final yo creo que esas personas lo inspiran a uno y hacen de que uno todos los días crezca con esa ímpetu, esas ganas y esos deseos de ser jugador profesional.

¿Te inspiró más Gallardo jugador, o Gallardo entrenador?

-Creo que con Gallardo al tenerlo en el día a día me enfoqué en hablar más con la persona, para ver qué situación uno tenía, que pasaba. Eran muchas horas que compartíamos dentro de los entrenamientos y por fuera tratábamos de aprovecha el tiempo para hablar de la vida y la familia, y no para hablar de fútbol. Gallardo se enfoca más en la persona que en el jugador. Una coincidencia con él es que cumplimos el mismo día los años. Me asemejo mucho porque tenemos una personalidad muy parecida.

¿Cambió tu carrera después de ganarle la final a Boca de los Libertadores? ¿Entraste en un conformismo futbolístico después de eso?¿hay algo más después de eso?

-Para mi si, para mí no hay nada más que esto. De cómo se presentó todo, no creo que haya más. Pero no creo que entré en un conformismo, River no te lleva a eso, al otro día tienes que madrugar, volver a trabajar y ganarte otro título, porque ese es el diario de River. Pero de campeonatos, de títulos, creo que no hay nada más que eso, entonces no es que entras  en una zona de confort, pero sabes que por todo lo que luchaste todo el año, y la meta que te trazaste lo lograste, y al final cuando la logras también tienes que pensar en descansar porque al final es algo que va a durar para toda la vida, toda la historia, y fuiste parte de ella. Fue un logro que fue muy difícil, y sabíamos que después de eso no pasaba nada más.

¿Te acordás de ese momento del gol, o tuviste que volver a verlo para recordar el momento por todo lo que se vive en esa situación?

-La verdad es que ahora lo veo más, mientras estaba en River no lo veía mucho, porque trataba de enfocarme en no ver más fútbol de lo que uno tenía que trabajar, hoy estoy más tranquilo y lo disfruto mucho más que cuando estaba en River.


¿Qué le decís a ese hincha que dice “volvé Juanfer”?

-Uno nunca sabe, al final cuando uno plantea cosas buenas y las personas a uno lo marcan como me marcaron a mí en Argentina y los hinchas de River, creo que después de todo eso quedan las puertas abiertas, sobre todo con los dirigentes, con el entrenador, con el grupo, con todos los muchachos y lo que representa para mí River, soy hincha de River, River cambió mi vida, River fueron los años más importantes de mi carrera futbolística hasta el día de hoy, y bueno, uno nunca sabe que podría presentar el destino, el día que me toque a mi tomar la decisión de volver seguramente lo hablaré y no habrá ningún problema en volver, asique muchas gracias al hincha por ese cariño y que de mi parte todo es recíproco hacia ellos.

D´onofrio dijo que ibas a definir el partido ¿Fue así?

- Si, si, me lo dijo una vez. Siempre nos acordamos de eso con el Presidente. Fue algo muy bonito. Todo eso viene de la fibra, la energía y de saber que tienen confianza y fe en uno. Eso es la vida. Cuando uno trabaja y se esmera, hablo del grupo que teníamos, era lo mínimo que nos merecíamos: ganar esa copa importante contra el rival directo, después de pasar un año como pasamos. Ese diálogo con el Presidente fue antes del partido en la Bombonera. Me dijo: "Yo te tengo una fe bárbara, vos vas a solucionar esta serie". Las palabras del presi tenían poder, pasó eso. Yo siempre trato de ingresar al campo de juego para disfrutar, y estar en esa final era motivo de gran orgullo y debía dejar que todo fluya y agradecer a la vida, el fútbol y a Dios lo que estaba viviendo. Solo me queda agradecerle el respeto y el cariño que siempre me tuvo. Le mando saludos y creo que eso va a quedar para toda la historia y nuestra memoria.

¿Cuál fue la primera imagen que se te pasa en la cabeza cuando le convertís a Boca en Madrid?

- Lo primero que se me pasó por mi cabeza fue mi abuela. Mi familia. Sabía que tenía que hacer las cosas bien y agradecer todo ese cariño y respaldo que me habían dado, después de que llegué a Argentina, y que habían sido duros desde la prensa, pero estaba ahí y que a pesar de eso, me había ganado mi lugar en el campo, y muchas situaciones se me pasaron por mi cabeza cuando convertí el gol, por ejemplo mi abuela, que estaba muerta, y quería que desde donde estuviera se sienta identificada con lo que estaba haciendo adentro de la cancha. Seguramente lo vio, sintió la vibra y seguramente me ayudó mucho desde donde ella está.

¿Cómo fue el encuentro con Gallardo después de ser campeones? ¿Qué te dijo?

- No hizo falta decirnos mucho. Nos abrazamos fuerte y nos dijimos que esto iba a durar para toda la vida. También les di las gracias por la confianza, por todo lo que había pasado. Yo muchas veces soy muy poco expresivo, soy muy frío ante las situaciones, pero muchas veces las miradas y los gestos hablan. Ese encuentro con Gallardo fue un acto más de agradecimiento que de felicitaciones, porque de alguna forma los dos nos ayudamos para conseguir el mismo objetivo.

¿Qué extrañás del día a día de River?

- Yo me quedo con todas las cosas bonitas vividas. Obviamente me falta todo el diario con mis amigos, con todas las cosas que viví, con el staff, con la gente del club, pero no me detengo en eso. Vivo el día a día y ellos saben que nos mantenemos en contacto. Me lamentó irme y no ver a los hinchas y tampoco el estadio lleno, porque estábamos en pandemia. Son esas cosas que uno nunca olvida, que siempre quiere vivirlas, como estar en el estadio con los hinchas. Creo que son esas cosas más que cualquiera otra cosa, pero esto es fútbol, uno nunca sabe en que momento llegan las cosas, es la vida, es así y trato de vivir el día a día. Aprendí a no enfocarme en lo que extraño si no en lo bonito que viví.

¿Te lo imaginás mucho tiempo a Gallardo en River?

- Yo siempre voy a querer que Gallardo sea feliz, independientemente de donde esté. Eso es lo que deseo. Es una excelente persona y entrenador, y tiene suficiente experiencia para decidir donde tiene que ir, pero uno como hincha de River quiere que se quede, pero al final que decida lo que quiera. Yo como amigo le deseo lo mejor y el mejor éxito del mundo. Él sabe muy bien que se lo quiere y que le tengo mucho aprecio y que va a estar feliz donde él quiera.

¿Cómo definirías el momento de Julián Álvarez?

-Me alegra mucho que esté haciendo las cosas bien, que esté mostrando todo su carácter, personalidad que realmente está teniendo en el campo. Hoy en día representa al fútbol argentino. Es una persona muy humilde, tranquila y trabajadora. Lo que está haciendo se lo merece. No tenemos que cometer el error de compararlo con nadie. Julián Álvarez tiene cosas de Julián Álvarez, nadie se asemeja a nadie. El tiene que marcar su propia historia y ponerlo en comparación con otro sería una falta de respeto con el resto y con la actualidad de Julián. Es él y está marcando su propio camino, su tendencia, su fútbol y me alegra mucho. Al final, se lo merece. Yo no quiero compararlo con nadie, porque al final todos somos diferentes.


¿Te ves en Qatar 2022 con Colombia?

-Siempre. Uno siempre quiere estar con su selección y representar su país, y quiere estar en un mundial. Solo deseo que podamos clasificar para poder estar ahí.

¿Cómo hiciste para no sentir presión y disfrutar lo qué haces? ¿Tuviste alguna experiencia que te permitió sentirlo así?

- A medida que uno va creciendo y teniendo madurez va pidiendo ayuda profesional. Yo estoy trabajando con un coach hace 4 años de crecimiento personal y neuro-lingüístico, eso me ayudó mucho para crecer como humano y eso lo terminé volcando en el fútbol. Creo que fue una gran ayuda que tuve y hasta el día de hoy me sirvió mucho. Creo que al final, la vida son momentos, que hay que vivirlos y que todos los errores nos ayudan a uno para mejorar y eso nos permite crecer como personas y que al final tienes que saber si te equivocas, no es tan malo, es bueno para aprender y llevarlo a cabo después. Ese es el lema que siempre trato de dejar.

Riquelme, muchas veces te elogió. ¿Qué te genera alguien como Román?

- Es una persona que inspiró a muchas generaciones de hoy en día. Para mí, lo que dijo antes de la final, son emociones que hablan solas, pero el respeto es máximo y la admiración es mucha. Cuando escuché a Riquelme hablar bien de mí, me llenó de orgullo y me inspiró a seguir haciendo las cosas bien, porque el reconocimiento de una persona que fue emblemática del fútbol argentino y para muchas generaciones, dejando de lado el Boca - River, a mi me llenó de orgullo, satisfacción y quiero agradecerle por todo lo que hizo, sin darse cuenta, para mí carrera y la de muchas personas. De Román me gustaba cuando la pisaba, cuando colocaba una pelota de gol o sus tiros libres. Son muchas cualidades que como jugador eran de admirar. Román fue esa persona que a uno lo inspiró a tener esa pasión por el fútbol.

¿Qué hiciste con la camiseta de la final de Madrid?

-La camiseta la tengo guardada obviamente en mi casa, como una pieza preciada, guardadita, intacta. Tengo guardado los botines y el premio al mejor jugador. La medalla también está ahí. Cada vez que lo veo me llena de orgullo.

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